lunes, 21 de abril de 2008

Caseta de Herramientas

Obtenido de Autosuficiencia.

CIMIENTO DE CONCRETO
para construir con tierra apisonada











Experimentar con la construcción de una pequeña caseta de herramientas puede ayudar a adquirir confianza y destreza para lanzarse a un proyecto de mayor escala.
En la unidad 1.14 comentamos que antes de tomar la decisión de edificar una vivienda de tierra, lo recomendable era completar el curso para tener una visión general de la casa ecológica. También decíamos que se va a editar una guía complementaria (la unidad 18) para los temas específicamente constructivos. Mientras tanto, no estaría mal realizar alguna experiencia a pequeña escala, como construir una caseta de herramientas (de 1,50 por 1,50 m) que le ayudará a familiarizarse con materiales y procedimientos básicos de albañilería.

La fundación o cimiento, es la base sobre la que va apoyada y anclada la construcción y que queda enterrada en el suelo. El cimiento soporta el peso de los muros y techos como también sus movimientos evitando que se dañen.

Para el armado del cimiento hay varias alternativas como piedras, pilotes suelo cemento, etc., pero sugerimos en este caso animarse a experimentar con concreto (hormigón). Al tratarse de una obra de poco tamaño, una eventual equivocación no acarreará consecuencias serias y será poco lo que gastará de más.

Una vez que haya elegido el lugar donde construir la caseta, habrá que despejar el terreno de piedras, arbustos y malezas en un perímetro de 2 x2 m. Luego, si hace falta, se emparejará el terreno para que quede lo más plano posible y a nivel.

Las zanjas para el cimiento se trazan con la ayuda de pequeños caballetes hechos con tablas o palos formando un cuadrado de 2x 2m. En los caballetes (bien afirmados al suelo) irán unos clavos (a 30 cm de distancia uno de otro), con los que se tensan las cuerdas que delimitarán el perímetro interno y externo de la excavación. Se colocan dos cuerdas por lado, en forma paralela y en escuadra. (ver figura). Para marcar los límites en el suelo, se coloca cal en un recipiente y se la va dejando caer siguiendo el contorno de las cuerdas. Antes de cavar, se sueltan las cuerdas, pero sin desmontar los caballetes, para usarlos para una verificación posterior.

Las zanjas se pueden cavar con pico o pala llegando a una profundidad de 60-80 cm, pero al finalizar la tarea, se le debe dar un repaso para que las paredes de la excavación queden perpendiculares al fondo, al que se lo debe dejar lo más plano posible y sin material suelto.

El cimiento consta de dos partes: La primera es una capa base de 200 kg de cemento por metro cúbico, y unos 7 cm de concreto, que se vuelca en el fondo y donde se apoya el entramado de estribos (espárragos de 6 mm de espesor) a los que se atan las barras de acero reforzadas mediante trozos de alambre. La segunda parte es un hormigón,de 300 kg de cemento por metro cúbico, que se apoya sobre el anterior y cubre los estribos sobrepasando unos 20 cm del nivel del suelo. Para ello tendrá que armar unos moldes de madera (de unos 3 a 5 cm de espesor) donde se volcará el concreto lo suficientemente líquido para que se pueda trabajar bien pero sin que llegue a quedar demasiado licuado y escurra. El sobrecimiento es más angosto que el cimiento (20 cm). Con un pisón se golpea la mezcla para que se distribuya completando el molde. Generalmente se dejan espárragos a la vista que quedarán en el interior del muro de tierra apisonada. El molde puede ser tratado unos días antes con una mezcla de aceite quemado y un poco de gas oil, y se debe mojar antes de verter el hormigón.

Los moldes se pueden sacar al tercer día de hormigonar y durante una semana se moja la fundación para que no se cuartee.

Composición de la mezcla:

1 parte de cemento Pórtland
3 partes de arena
4 partes de piedra
agua

El concreto que va en el interior de los moldes lleva menos piedra para aumentar la proporción de cemento.


ADOBE Y TIERRA APISONADA
construcción de una caseta de herramientas: piso y techo











Para realizar una práctica a pequeña escala de construcción con tierra (o adobe) proponemos un pequeño depósito para protejer herramientas



EL PISO Pasada una semana del terminado de los cimientos ya estamos listos para encarar la tarea de rellenado, apisonado y acabado del piso.

Los materiales que se pueden emplear para esta función son varios y dependen de las posibilidades económicas. Los hay de suelo compactado, concreto, madera y también bambú. Aquí abordaremos el piso de suelo estabilizado o compactado.

La primer etapa consiste en el relleno de la superficie que ocupará el piso; este relleno nos servirá de base estable para soportar nuevas capas de material sin que se hunda, fisure o quiebre. A los efectos de que su estructura sea firme pero que no nos consuma cemento, este relleno se hace con una mezcla de tierra y ripio. La tierra puede ser la misma que sacamos al escarbar siempre y cuando no sea muy arcillosa pues esta se contrae al secarse y puede hacer frágil el soporte. Si no hubiera otra alternativa, se la mezcla con arena en una relación 2 a 1. También hay que evitar la tierra de la capa superior porque suele tener pasto.

Las proporciones sugeridas de la mezcla para el suelo estabilizado son de 10 partes de tierra, 2 de ripio o grava, 1 de cemento y 1 de agua.

Este material se distribuye alcanzando una altura de 10 a 15 centímetros y luego se lo apisona bien.

La herramienta empalada para esta actividad es un pisón que puede ser construido por nosotros mismos empleando una lata metálica de no más de 5 litros a la que la llenamos de mezcla de cemento e introducimos un palo o listón de 1,20 metros con clavos atravesados en la punta para que hagan de traba después del fraguado.

Apisone fuertemente la primer capa, riéguela y repita la operación hasta conseguir una altura de 10 centímetros aproximadamente, ponga una capa de ripio de 3 a 5 centímetros y vuelva a apisonar. Luego eche la ultima capa de tierra estabilizada coloque las instalaciones de agua o desagüe que correspondan y repita la operación de apisonamiento.

Así puede quedar el piso terminado o preparado para colocarle baldosas, mezcla de concreto o ladrillos.

Si quisiéramos mejorar el aislamiento del piso contra el calor o el frío del suelo, se puede hacer que el piso tenga huecos por donde circule el aire o este haga de aislante. Estos canales interiores se pueden hacer con caños del drenaje o ladrillos huecos a los que luego se los cubre con una capa fina de concreto. EL TECHO En esta estructura de iniciación, el techo que proponemos es inclinado y se soportará sobre el perímetro de las paredes. Este alero se puede armar con planchas de fibro-cemento que poseen buenas propiedades térmicas y son de bajo costo. La inclinación evitará que el agua de lluvia quede acumulada en su superficie.

Si la zona donde hacemos esta construcción es lluviosa, conviene prolongar el alero para proteger la entrada. En este caso hay que poner dos o tres vigas para que se apoyen las láminas ya que si las dejamos sin soporte, las mismas se rompen con el viento.

Durante la construcción de la armadura de estos techos hay que tener cuidado de que los travesaños y las tiras sean rectos y colocados a nivel para evitar problemas posteriores cuando se quiera mejorar la aislación con tejas u otro material.

En el caso de que se quiera captar el agua de lluvia, se puede clavar una canaleta a los travesaños de la estructura del techo. Esta canaleta la podemos hacer con tres tablas clavadas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La chapa acanalada se clava en la canaleta superior, no en la inferior como muestra la imagen. Es un error fundamental.